29.1.18

UNA CUALQUIERA


Por Carolina De Leo

Una cualquiera, como loca, boca, sola.
Que anda por piantarse, casi como nosotros.
Una cualquiera, como sinsonte, horizonte, monte.
Que se fugó del diccionario, que no venga a la memoria, que pierda su sentido y que tiemble en el hallazgo.
Una cualquiera, como viento, aliento, alimento.
Que no escarmiente, que insista en nombrar a la gotera del paraguas y a la misma lluvia como bendición.
Una cualquiera, como pluma, espuma, bruma.
Que conspire para faltarle el respeto a lo que llama, que dé un zarpazo, que irrumpa en sobresalto, que luego se vuelva disimulo y otra vez lo de siempre pero distinto.
Una cualquiera, como antorcha, escarcha, hacha.
Que con otra presencia y otra prestancia, a préstamo, avive este rato de vida que nos tocó, como a cualquiera.